Por más de tres décadas, Charlie Zaa ha sido una figura insigne del bolero latinoamericano, un artista que ha cultivado una carrera desde la nostalgia, la melancolía y la devoción romántica. Sin embargo, hoy su nombre se asocia a una noticia inesperada. La Fiscalía colombiana solicitó la extinción de dominio sobre bienes suyos valorados en más de 25.000 millones de pesos (unos $6.2 millones de dólares), debido a presuntos vínculos con actividades ilegales relacionadas con el paramilitarismo.
Entre los activos en cuestión se encuentran propiedades en Girardot —su ciudad natal— y en Ibagué, incluyendo el centro comercial Oasis y las discotecas Kapachos y Solaris, establecimientos que, según testimonios de exparamilitares del Bloque Tolima de las AUC, habrían servido como fachada para operaciones ilícitas a cargo de alias “Daniel” (Daniel Goyeneche).
La Fiscalía sustenta su solicitud con declaraciones que señalan que un familiar del artista entregaba informes de ingresos a miembros del grupo armado, beneficiando supuestamente a familiares de sus líderes. La falta de documentación clara sobre la administración y obras en dichos inmuebles ha reforzado las sospechas.
Charlie se defiende
En un comunicado difundido en sus redes sociales, Charlie Zaa se dirigió a sus seguidores.
“Estoy, como siempre, en total disposición de colaborar con las autoridades y entregar todas las pruebas necesarias para demostrar mi inocencia”, afirmó.
“Todo lo que tengo ha sido fruto de un trabajo honesto y constante (…) agradezco de corazón a quienes me han mostrado su apoyo y confianza. Estoy convencido de que muy pronto todo esto se esclarecerá”.
El cantante también apeló al papel de los medios, pidiendo una cobertura responsable y recordando que la medida judicial no lo acusa directamente a él como individuo, sino que se refiere a una investigación sobre bienes vinculados a su entorno familiar. En su mensaje, hizo hincapié en su derecho constitucional a la presunción de inocencia, principio que deberá prevalecer mientras no se demuestre lo contrario.